OFICINAS AGENCIA PUBLICIDAD. MILAN. ITALIA. 2003.
En colaboración con SABINA ROSSIGNOLI

En una nave industrial en desuso situada cerca del centro histórico de la ciudad de Milán se nos plantea, en colaboración con Sabina Rossignoli, la reforma de la misma para convertirla en oficinas de una agencia de publicidad.
La nave está dividida en dos cuerpos, uno de una altura que se abre a la calle y otro paralelo a este, separado por un patio interior y que tiene dos alturas. La entrada principal a la misma se produce por un espacio de unión entre estos dos cuerpos, en el que hemos colocado la escalera de comunicación de las dos plantas. Se trata de un elemento ligero y potente a la vez, que se convertirá en pieza fundamental del proyecto.

Se ha buscado crear un espacio flexible y a la vez unitario, que cumpla con las necesidades que nos plantea la propiedad, diferenciando entre zonas de reunión, trabajo, presentación y “zonas creativas”.
En el cuerpo abierto a la calle, que se trata de un espacio único, con cubierta a dos aguas, sostenidas por una cerchas metálicas vistas, se decide colocar los despachos cerrados, cada uno de ellos coincidiendo con las ventanas existentes y creando en el medio de estos un espacio destinado a presentaciones. En el cuerpo trasero se distribuyen espacios abiertos de trabajo, separados por unos tabiques bajos.
El patio interior, en el que se introduce la vegetación, ha sido tratado como una zona de trabajo más, al aire libre, que sirva como elemento de conexión entre los dos cuerpos principales.